El Braga destapa las vergüenzas del Celta

El segundo amistoso del Celta en la pretemporada revela la urgente necesidad de varias incorporaciones, especialmente en el ataque, lo que podría influir en los mercados de apuestas. La falta de efectividad puede llevar a un bajo rendimiento en la primera parte de la temporada, lo que podría hacer que los apostadores consideren a Celta como una opción menos confiable.

El segundo amistoso de la pretemporada del Celta ha servido para activar todas las alertas. El equipo vigues necesita varios fichajes de forma urgente. Principalmente en la zona de ataque, donde fue la nada absoluta. La baja de Aspas en este partido todavía limitó más el talento, algo de lo que anda escaso Giráldez en su plantilla. La única ocasión de la primera parte fue un tiro a las nubes de Hugo González, perteneciente al filial céltico.

Si el asunto está muy verde en ataque, la situación no mejora en defensa. El Braga no necesitó apretar el acelerador para marcar dos goles y generar otras dos ocasiones claras en los primeros 45 minutos. Gorby aniquiló a Radu mediada la primera parte con un zurdazo que iba centrado y en el que el meta rumano podía haber hecho algo más. Se desquitó minutos después al despejar un disparo de Horta, aunque también se trataba de un chut lejano.

Posteriormente, un mal control de Mingueza acabó con el catalán y Starfelt cometiendo penalti al intentar tapar la internada portuguesa. No pareció mucha cosa, pero Zalazar no perdonó desde los once metros. Al filo del descanso pudo sentenciar Ricardo Horta, pero su zurdazo a placer, sin oposición alguna, se estrelló en el larguero.

Giráldez cambió todo el once al descanso y la regañina debió surtir efecto, porque el equipo salió más enchufado en la segunda parte. Fruto de ello, Sotelo conectó con Jones y el marroquí recortó distancias con un buen disparo. El propio Sotelo tuvo el empate en sus botas minutos después con un lanzamiento de falta al borde del área, aunque le faltó ajustar un poco más la mirilla.

Sin embargo, el camino hacia la remontada acabó diluyéndose como un azucarillo en el café. Los vigueses fueron de más a menos en la segunda parte ante un Braga que ya estaba pensando en el partido del jueves, en esa primera eliminatoria previa de la Europa League. A pesar de ello, Diego puso el broche al partido con un golazo desde su casa. Su disparo desde unos 35 metros sorprendió a Iván Villar, que solo tocó ese balón para recogerlo de la red.

La mala noche del Celta en Braga se vio reflejada en el palco, donde Marián Mouriño miraba hacia el cielo, quizás pensando que resta mucho trabajo por hacer en los despachos. Giráldez necesita varios fichajes. El porriñés ya desveló que hacían falta tres atacantes, pero es probable que necesite reforzar más líneas, seguramente todas. Desde la defensa hasta el mediocentro e incluso en la portería, donde Radu está dejando bastantes dudas en estos dos primeros partidos.

Diario As