El regreso de Éder Militão y Dani Carvajal tras lesiones puede influir positivamente en el rendimiento del Real Madrid, lo que podría hacer que los apostadores consideren al equipo como un candidato más fuerte en los próximos partidos. Sin embargo, la situación incierta de David Alaba, que sigue lidiando con lesiones, plantea dudas que podrían afectar el rendimiento general del equipo.
En medio de la amarga derrota del Real Madrid ante el Paris Saint-Germain, una noticia positiva surgió entre la decepción: el regreso de dos piezas clave del plantel blanco, Éder Militão y Dani Carvajal, tras largos periodos de inactividad por lesión. También fue incluido en la convocatoria Eduardo Camavinga, aunque no llegó a disputar minutos.
Con los regresos inminentes de Ferland Mendy y Endrick, la enfermería del conjunto merengue empieza a vaciarse, salvo por un nombre que sigue generando incertidumbre: David Alaba. El central austríaco parecía próximo a su regreso durante la pasada cita mundialista, pero una nueva dolencia frustró sus planes.
En pleno proceso de recuperación tras una operación en el menisco de su rodilla izquierda realizada el 30 de abril, Alaba sufrió una rotura en el sóleo de la misma pierna. Esta recaída lo dejó nuevamente fuera de combate justo cuando vislumbraba la recuperación total.
Desde su llegada al Real Madrid en 2021, tras una exitosa etapa en el Bayern de Múnich, el nacido en Viena se consolidó como uno de los líderes de la zaga blanca, siendo pieza clave en la conquista de la decimocuarta Champions League. No obstante, desde diciembre de 2023, su trayectoria ha estado marcada por un calvario físico. La lesión que marcó el inicio de su declive se produjo el 17 de diciembre de 2023 ante el Villarreal en el Santiago Bernabéu: una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda.
Intervenido quirúrgicamente en Innsbruck, su proceso de rehabilitación se vio plagado de complicaciones: afectaciones en el cartílago, daños en el menisco y una posterior artroscopia en mayo de 2024. Su recuperación se convirtió en una travesía de plazos inciertos y recaídas constantes.
Tras 399 días de ausencia, Alaba volvió a los terrenos de juego en enero de 2025. Participó en entrenamientos de alta intensidad, fue convocado para compromisos como la Supercopa de España y la Copa del Rey, y disputó algunos minutos frente a Las Palmas y otros rivales. Su técnico, Carlo Ancelotti, aseguró que el jugador estaba “físicamente bien” y a la espera de adquirir ritmo competitivo. No obstante, su participación fue escasa: tan solo 14 encuentros y 601 minutos acumulados en toda la temporada.
Cuando parecía que su progresión se estabilizaba, una nueva lesión — rotura de menisco en abril — lo apartó nuevamente de los planes del equipo. Pese a ello, viajó con la plantilla al Mundial de Clubes en Estados Unidos. No obstante, durante un entrenamiento, sufrió una nueva rotura, en este caso en el sóleo izquierdo, que lo descartó de forma definitiva para el resto del torneo. Un nuevo contratiempo que acentuó la frustración en torno a su situación.
La situación de Alaba plantea un desafío para el Real Madrid. Deportivamente, su rol en el equipo ha quedado relegado a un segundo plano. En la actual jerarquía defensiva establecida por Xabi Alonso, ha sido superado por Rüdiger, Militão, Huijsen y Asencio, mientras que jóvenes como Joan Martínez reclamarán su espacio con fuerza en poco tiempo.
Desde el punto de vista económico, su contrato vigente hasta junio de 2026 y su salario estimado en 12,5 millones de euros netos anuales, representan una carga considerable, especialmente en ausencia de un retorno deportivo acorde. Moralmente, sigue siendo una figura respetada tanto por el vestuario como por la afición, y su presencia en la concentración del Mundial de Clubes —aunque no jugara— es prueba de su peso institucional.
Ante este escenario, el club sopesa la posibilidad de facilitar su salida durante el mercado de verano para aligerar masa salarial y liberar una ficha valiosa. Sin embargo, el futbolista no parece dispuesto a abandonar la entidad, aferrándose a su deseo de cumplir su contrato y llegar en condiciones al Mundial de 2026, una cita clave tanto para su legado como para las aspiraciones de la selección austríaca.
Lo inmediato pasa por su recuperación total, enfocada en sanar tanto el sóleo como la rodilla izquierda. Solo una rehabilitación exitosa le permitirá aspirar a regresar al nivel que una vez lo consagró. El futuro, sin embargo, está plagado de interrogantes. Uno de los referentes defensivos del Real Madrid y de la selección austríaca vive su momento más delicado. De su recuperación física dependerá no solo su carrera en el club, sino su lugar en la historia de los ocho que sumen una presencia significativa en el Mundial con su selección.
El dilema es tan personal como organizativo para el Real Madrid: ¿arriesgar en la confianza a un veterano estrella o girar el timón hacia el futuro inmediato?
https://betarena.featureos.app/
https://www.betarena.com
https://betarena.com/category/betting-tips/
https://github.com/Betarena/official-documents/blob/main/privacy-policy.md
[object Object]
https://github.com/Betarena/official-documents/blob/main/terms-of-service.md
https://stats.uptimerobot.com/PpY1Wu07pJ
https://betarena.featureos.app/changelog
https://twitter.com/betarenasocial
https://github.com/Betarena
https://medium.com/@betarena-project
https://discord.gg/aTwgFXkxN3
https://www.linkedin.com/company/betarena
https://t.me/betarenaen